Os confieso que no me la esperaba tan pronto. Ayer, en uno de mis paseos diarios campestres, esta vez por el entorno de la Cueva del Juyo y la Peña Cuadrada de mi pueblo, me encuentro laderas enteras con la prímula florecida¡¡¡ Alegría inesperada, sorpresa y temor ante la bajada fuerte de temperatura y la vuelta al invierno de los próximos días, pero bueno…ella siempre intenta ser la primera que avisa de que para la primavera falta poco¡¡¡ Y aunque el invierno no ha dado sus últimos zarpazos, aquí tenemos ya a la planta que anuncia la primavera, la pequeña prímula, brotando valiente.
Con el fin de practicar el arte de la atención, y también para animaros a que preparéis vuestros propios herbarios, tal y como solemos hacer en los talleres primaverales y veraniegos en nuestro jardín de aromáticas, os pongo unas imágenes para que hagamos una correcta distinción entre las dos variedades de primavera más comunes:
Esta es la Prímula vulgaris:
Esta es la Prímula veris:
Fuente: http://www.vivelanaturaleza.com
Tradicionalmente se usa como medicinal la Prímula veris. Sin embargo, la P. Vulgaris, más común y abundante en la península ibérica, la puede sustituir sin problemas. Es más, dada la escasez que afecta a la P. Veris, protegida en algunos lugares, es mejor abstenerse de recolectarla, especialmente en lo que se refiere a la raíz, ya que, obviamente, supone la muerte de la planta.
En nuestro programa de radio del Jardín de la Salud, hablamos largamente de su historia, propiedades medicinales tradicionales, con algunos consejos y recetas para su uso medicinal, en infusión, en cataplasmas, etc. y muchas más curiosidades.
La primavera es una planta comestible, y tal y como os prometí en dicho programa de radio, aquí va alguna otra receta más, aparte de las que os comenté, con primaveras:
VINO DE PRIMULA (*)
Parece ser que en Inglaterra se hace un vino con los pétalos de Prímula vulgaris, que se realiza de la siguiente manera:
Se pone a macerar en 6 litros de agua un puñado de flores de Prímula vulgaris sin los tallos y los cálices, medio kilo de azúcar, una cucharada de mermelada de cerezas o de ciruelas, un vaso de zumo de limón, y la corteza de un limón.
La maceración debe durar 100 días exactos, luego el vino resultante podrá ser filtrado y embotellado; antes de echar el vino en las botellas se pondrá en el fondo de cada una de ellas un terrón de azúcar; luego se taparán con cuidado y se pondrán el fresco.
(* «Guía Incafo de las plantas útiles y venenosas de la Península Ibérica y Baleares»
Diego Rivera Núñez/Concepción Obón de Castro
Editorial: Incafo, España, 1991)
TARTA DE PRIMAVERA(*)
Preparación: tomar 200 gr de flores, cortándolas por el extremo superior del pedúnculo, picarlas en un mortero y mezclarlas con medio litro de crema de leche. Llevar a ebullición y hervir por unos pocos minutos, dejar enfriar e incorporar batiendo cuatro huevos. Endulzar con un poco de miel; en ese momento la mezcla debe tener consistencia espesa. Cubrir una fuente esmaltada de horno con pasta para tartas y verterle encima la mezcla anterior. Cocer a horno fuerte por una hora y servir caliente o frío.
(*Plantas Silvestres Comestibles (Spanish Edition)
Genders, Roy
Editorial: Blume, 1994)
BUÑUELOS DE CÁNCARO (prímulas) (*)
Hojas de Cáncaro, 200g harina, 1/2 vaso de leche, 6 huevos, 2 cucharadas de azúcar (o panela), sal y aceite
Mezclamos la harina con la leche y a continuación incorporamos los huevos ya batidos. Añadimos el azúcar y la sal y removemos hasta tener una pasta fina (si queremos que al freírlas hinchen más incorporaremos primero las yemas y luego las claras a punto de nieve). Introducimos en la pasta las hojas, escurrimos un poco y freímos en aceite bien caliente. Las sacamos cuando estén
doradas. Las servimos en una fuente espolvoreadas de azúcar.
(*BIENAVENTURADA LA «MALEZA» PORQUE ELLA TE SALVARÁ LA CABEZA . USOS DE 113 PLANTAS SILVESTRES DE LOS CAMPOS NORTEÑOS, César Lema Costas et al. 2016)
Evitad las posibles confusiones entre las distintas especies: Las primaveras autóctonas de la Península, a saber: Prímula vulgaris (también denominada Prímula acaulis), Prímula veris (antes llamada officinalis) y Prímula elatior, son comestibles. Sin embargo, las primaveras asiáticas cultivadas como ornamentales como Prímula obconica, Prímula sinensis, Prímula cortusioides, Prímula sieboldi, Prímula mollis, y multitud de híbridos que generan flores de todos los colores, provocan con frecuencia dermatitis.
