Con esencias de Cedro del Atlas, Cedro de Virginia, Lavandas, Romeros, Naranjo amargo y verbenas
«Cruzas por el crepúsculo.
El aire
tienes que separarlo casi con las manos
de tan denso, de tan impenetrable.
Andas. No dejan huellas
tus pies. Cientos de árboles
contienen el aliento sobre tu
cabeza. Un pájaro no sabe
que estás allí, y lanza su silbido
largo al otro lado del paisaje.
El mundo cambia de color: es como el eco
del mundo. Eco distante
que tú estremeces, traspasando
las últimas fronteras de la tarde»
Angel González

bajo los cedros
abre noches fluviales
habitadas de luces y de luceros» Carlos Pellicer

me avecina con todas sus agujas
para tejer los altos besos del follaje?» Pablo Neruda