La berza o la col fue considerada durante siglos como el médico de los pobres, y el dr. Blanc, un estudioso en la materia se quejaba amargamente de lo siguiente, dicho en sus palabras: “Ser raro, provenir de un país lejano, llevar un nombre extraño, difícil y exótico, y, sobre todo, ser caro, son atributos que valorizan a un medicamento, y de los cuales, la humilde hoja de col está completamente desprovista”
Importancia fundamental ha tenido en Europa desde la antigüedad, y en América desde que fue llevada allí por los colonizadores. Conocida por celtas, muy apreciada por griegos que la servían en comidas públicas. Crisipo le dedicó un tratado entero, Pitágoras alabó sus virtudes e Hipócrates, uno de los padres de la medicina, la prescribía para curar diarreas y cólicos.
En la época romana, aparece citada por Catón como remedio para trastornos intestinales y pulmonares, y sobre todo para aumentar la producción de leche a las mujeres que daban el pecho.
El propio Catón (232 a.C.- 147 a.C) afirmaba que si los romanos pudieron prescindir de los médicos durante siglos fue gracias a la col.
La tomaban también al final de sus pantagruélicos banquetes para suavizar los efectos del alcohol.
De hecho, parece que hubiera una enemistad entre la col y la vid: algunos autores antiguos afirman que, si cultivamos coles cerca de la vid, ésta morirá. Quizá es por esto que los alemanes toman cerveza con el chucrut.
La col es una verdura que aporta pocas calorías, pero tiene un valor nutritivo muy elevado, es un alimento medicina, y ahora en invierno, de los ricos ricos (si te interesa su valor culinario y maneras de consumirla y cocinarla, te invitamos a asistir a nuestro Club de cocina¡¡ más info en el calendario de la web)
COL
Brassica oleracea. Familia de las crucíferas

Se pueden agrupar bajo este nombre todas las variedades de especies de col: brécol, coliflor, lombarda, coles de Bruselas, las coles rizadas, col china, repollo, berzas…
Antiguamente se utilizaba únicamente como planta medicinal, tantas son sus virtudes.
Se recomienda para el alivio de enfermedades de tipo reumático, como artritis, reuma, etc. Es buena para tratar el estómago, ya que actúa como antiácido natural, es antiinflamatoria,
Su gran riqueza en minerales y oligoelementos explica sus virtudes remineralizantes, antianémicas y reconstituyentes. Las coles pueden proporcionar un mejoramiento rápido y general del organismo, un aumento de la vitalidad y la energía y la desaparición de trastornos intestinales, digestivos, urinarios y hasta respiratorios.
Las coles también han resultado ser beneficiosas en dolencias como el hipertiroidismo, las afecciones de bronquios, voz ronca y incluso se ha estudiado su papel protector ante el cáncer

EN USO EXTERNO:
Todos sus componentes justifican ampliamente su eficacia a nivel interno, sin embargo, todavía no se puede explicar científicamente su gran eficacia en las aplicaciones externas, ya que parece que las hojas de col tienen una particular afinidad con los humores corruptos, obligándoles a salir de los tejidos. Basta una aplicación en puntos de infección, para que las toxinas lejanas sean atraídas hacia el exterior y expulsadas.
Favorece la cicatrización de heridas simples y complejas, cura úlceras externas, llagas infectadas y gangrenosas, y cualquier tipo de erupción cutánea: granos, verrugas, ampollas, quemaduras, etc. Calma el dolor y desinflamar el nervio ciático, así como las articulaciones de los artríticos.
A nivel dermocosmético, se la puede emplear en casos de acné, conjuntivitis y dermatitis.
Como veis, más que un médico de pobres, es una medicina de sabios para ser ricos en salud¡¡¡